Romanos 8: 16-17
El Espíritu mismo da
testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios. Y si hijos, también
herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos
juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados.
Hay que ser conscientes de lo que
somos el nos adoptó y ahora somos hijos. TENEMOS QUE SER CONCIENTES de eso
Por lo cual se tiene que dar que
somos más que vencedores.
Somos herederos de la vida eterna
y de la victoria que Jesucristo conquistó en la cruz del calvario.
Condición: si es que padecemos
junto con él, persecución. Dios se va a glorificar en todas las situaciones.
Basta que usted lo crea.
I Timoteo 1:18-20
Este mandamiento, hijo
Timoteo, te encargo, para que conforme a las profecías que se hicieron antes en
cuanto a ti, milites por ellas la buena milicia, manteniendo la fe y buena
conciencia, desechando la cual, naufragaron en cuanto a la fe algunos, de los
cuales son Himeneo y Alejandro, a quienes entregué a Satanás para que aprendan
a no blasfemar.
Creer las profecías y
encaminarnos hacia ellas.
Manteniendo la fe. No solamente
se nos ha dado, sino que hay que mantenerla, hay que cuidarla.
Tener buena consciencia es creer
en ello.
Para la carne es difícil todo lo
del espíritu.
Como fuimos engendrados en el
Espíritu Santo, para él no hay nada imposible.
Los que desecharon la buena
conciencia fueron entregados a Satanás.
Por tanto, hay que poner la
mirada en Jesucristo
Hebreos 12: 1 – 3
Por tanto, nosotros también,
teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo
peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que
tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe,
el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el
oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios. Considerad a aquel que
sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo
no se canse hasta desmayar.
Otra pauta: despojarse del pecado
Otra: Correr con paciencia (no a
la loca)
Otra pauta: puestos los ojos en
Jesucristo.
El gozo puesto delante de él era
el amor por las almas
El sufrió, tuvo luchas, usted no
se desanime por nada.
Otra pauta: Hay que decirle no al
mundo de pecado.
Santiago 1: 27
La religión pura y sin mácula
delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus
tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.
Nosotros llenos del Espíritu
Santo podemos compartir la palabra al que no la tiene.
Dándole la gloria a Jesucristo.
Yodo lo que puedas hacer por el
prójimo hágalo, pero dirigido por el Espíritu Santo.
A unos les falta el padre y a las
otras el esposo.
Guardarse sin mancha de pecado
I Juan 2: 15-17
No améis al mundo, ni las
cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está
en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos
de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.
Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece
para siempre.
No amar el mundo de pecado
Los deseos de la carne, la
codicia y vanagloriarse de lo que se tiene.
El que hace la voluntad de Dios
tiene la pauta para ser vencedor.
Otra pauta: permanencia en la
palabra:
Juan 15: 7
Si permanecéis en mí, y mis
palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.
Si estás en la palabra de Dios es
imposible pedir algo que no esté en la voluntad de Dios
Otra Pauta es estar esperando a
Jesucristo
Estén ceñidos vuestros lomos,
y vuestras lámparas encendidas; y vosotros sed semejantes a hombres que
aguardan a que su señor regrese de las bodas, para que cuando llegue y llame,
le abran en seguida. Bienaventurados aquellos siervos a los cuales su señor,
cuando venga, halle velando; de cierto os digo que se ceñirá, y hará que se
sienten a la mesa, y vendrá a servirles. Y aunque venga a la segunda vigilia, y
aunque venga a la tercera vigilia, si los hallare así, bienaventurados son
aquellos siervos. Pero sabed esto, que si supiese el padre de familia a qué
hora el ladrón había de venir, velaría ciertamente, y no dejaría minar su casa.
Vosotros, pues, también, estad preparados, porque a la hora que no penséis, el
Hijo del Hombre vendrá.
Debemos dejar que el Espíritu Santo
obre de una manera descomunal.
Estad preparados
Dispuestos a sufrir:
I Pedro 4: 1 – 5
Puesto que Cristo ha padecido
por nosotros en la carne, vosotros también armaos del mismo pensamiento; pues
quien ha padecido en la carne, terminó con el pecado, para no vivir el tiempo
que resta en la carne, conforme a las concupiscencias de los hombres, sino
conforme a la voluntad de Dios. Baste ya el tiempo pasado para haber hecho lo
que agrada a los gentiles, andando en lascivias, concupiscencias, embriagueces,
orgías, disipación y abominables idolatrías. A éstos les parece cosa extraña
que vosotros no corráis con ellos en el mismo desenfreno de disolución, y os
ultrajan; pero ellos darán cuenta al que está preparado para juzgar a los vivos
y a los muertos.
I Pedro 4: 11-19
Si alguno habla, hable
conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre conforme al poder
que Dios da, para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien
pertenecen la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén.
Amados, no os sorprendáis del
fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os
aconteciese, sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de
Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran
alegría.
Gozaos por padecer. Nosotros lo
que hacemos es llorar por padecer.
No, gócese ya porque Dios lo va a
sacar de ahí
Si sois vituperados por el
nombre de Cristo, sois bienaventurados, porque el glorioso Espíritu de Dios
reposa sobre vosotros. Ciertamente, de parte de ellos, él es blasfemado, pero
por vosotros es glorificado. Así que, ninguno de vosotros padezca como
homicida, o ladrón, o malhechor, o por entremeterse en lo ajeno; pero si alguno
padece como cristiano, no se avergüence, sino glorifique a Dios por ello. Porque
es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios; y si primero comienza
por nosotros, ¿cuál será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de
Dios? Y: Si el justo con dificultad se salva, ¿En dónde aparecerá el
impío y el pecador? De modo que los que
padecen según la voluntad de Dios, encomienden sus almas al fiel Creador, y
hagan el bien.
A pesar de todo hagamos el bien
Otra Pauta: tenemos que estar
luchando contra el mal
I Pedro: 3: 8 – 13
Finalmente, sed todos de un
mismo sentir, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables;
no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario,
bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición.
Porque: El que quiere amar la
vida Y ver días buenos, Refrene su lengua de mal, Y sus labios no hablen
engaño; Apártese del mal, y haga el bien; Busque la paz, y sígala. Porque los
ojos del Señor están sobre los justos, Y sus oídos atentos a sus oraciones;
Pero el rostro del Señor está contra aquellos que hacen el mal. ¿Y quién es
aquel que os podrá hacer daño, si vosotros seguís el bien?