Génesis 1:1-2
“En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra
estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y
el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”.
Maranata significa Cristo viene
Este texto tiene que ver con el
título.
Nosotros, aunque nacimos de nuevo,
todavía hay tinieblas, pero el Espíritu de Dios se movía en medio de ese
desorden.
Todos recibimos a Cristo y creímos,
pero puede haber desorden en este momento y hay que volver a esos inicios.
Job 26: 12
“El agita el mar con su poder, Y con su entendimiento hiere la
arrogancia suya”.
En nuestras vidas se puede
levantar un mar de arrogancia, pero él
puede actuar si tú te dispones. Debemos dejar que el Espíritu se mueva a través
de la palabra que ha sido consignada en nuestros corazones.
El Espíritu Santo ha
definido que nosotros somos hijos de Dios y como sus hijos somos humildes y
sencillos en Isaías 66 dice: “yo miraré aquel pobre y humilde de espíritu y que
tiembla a mi palabra”. Tenemos que estar muy pendientes de que verdaderamente
se mueva el Espíritu Santo de Dios a través de la palabra que ha sido
consignada en nuestros corazones.
Maranata: Cristo viene, si
al que encuentre sin estar en el Espíritu Santo acá se quedan, eso va a ser un
lloro y un quejido: “pero si yo escuché,
si yo estuve tan cerca”, dirán los que se queden. El rapto se está oliendo. La
misericordia de Dios llega hasta un momento. En Sodoma y Gomorra llegaron hasta
lo más bajo y hasta donde está llegando este mundo hoy: a una pedantería, a una
cosa tan horrible en todas las áreas, hacen favores pero esperan algo a cambio,
buscan la alabanza del ser humano.
Cristo viene y tenemos que
dejar muchas cosas entre ellas la arrogancia, no se puede decir cristiano quien
tiene una arrogancia bien tremenda. Hay
que ser sencillo para reconocer los errores.
Cristo está a las puertas.
Nadie podrá saber mandar y ordenar cuando nunca ha aprendido a obedecer.
Nosotros somos de la
estirpe de Jesucristo, el ADN se nos ha sido cambiado, humildes y sencillos
para someternos con la mayor tranquilidad a la palabra de Dios no por el poder
nuestro, sino por el poder del Espíritu Santo estamos en esa capacidad. Por eso
estamos dotados para irnos todos en el arrebatamiento: la gracia es para todos.
San Juan 3: 5
“Respondió
Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del
Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios”.
A Veces cuando el Señor
nos da los dones, creemos que somos nosotros los que obramos y nos creemos
mucha cosa, igual ocurre cuando nos da bienes materiales: no volvemos
arrogantes.
El agua quiere decir su
palabra, en su palabra se mueve el Espíritu Santo.
En proverbios 28:1 dice: “Huye
el impío sin que nadie lo persiga; mas el justo está confiado como un león”.
Al león nadie lo atemoriza, es el
rey de la selva. El Espíritu Santo en nuestras vidas reina sobre cualquier
situación. Si nos atemorizamos, qué está pasando, hay que nacer del agua y del
Espíritu. Si su vida está desordenada hoy, quien sabe que está pasando. Viene
la advertencia: Maranata, Cristo viene. En Corintios 16 nota muy claramente que
tenemos que estar irreprensibles. Estemos muy convencidos de que Cristo está a
las puertas, Pablo convencido en el siglo 1º que Cristo venía, si él viera esto 20 siglos después y la iglesia en
esa tranquilidad. Pablo no había visto la cantidad de apostasía que nosotros
estamos viendo.
Cuidado, el que ha nacido del agua:
por la palabra fue engendrado, fue engendrado por el Espíritu Santo porque esto
lo inspiró el Espíritu Santo. Si usted no se mantiene en la Palabra y que el
Espíritu Santo se esté moviendo usted no está preparado para la Maranata, no
está preparado para irse en el rapto.
San Juan 7: 38 -39
“El
que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua
viva. Esto dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en él; pues
aún no había venido el Espíritu Santo, porque Jesús no había sido aún
glorificado”.
Por el creer, permanezca
creyendo, ya sabemos que por la fe es que se activa el poder de Dios. Dios se
goza mucho cuando oramos (eso está en proverbio 15:8: El sacrificio de los
impíos es abominación a Jehová; mas la oración de los rectos es su
gozo.
Cómo
se agradará Dios cuando le creemos. Dios nos ha dado lindos talentos y cuando
venimos a él aparecen los dones y luego el fruto.
El
que cree en mi: habla de creer y el creer bíblico está basado en la obediencia,
se basó en la escrituras, se baso en las aguas que en nosotros se ha
implantado. Entre nosotros a veces no se ve ni un saludo, ni una mirada.
Dice
Apocalipsis (21:8) que los cobardes no entrarán en el reino de los cielos. Los
cobardes son los que no permanecen en la fe, que llega cualquier problema pequeño
y ahí mismo los debilita. Recuerden que en Jericó empezaron mucho y terminaron
poquitos, en el aposento alto empezaron como 500 y terminaron 120.
Nosotros
ya somos de la estirpe de nuestro Señor Jesucristo y el Poder ya está puesto en
nuestras vidas por su Espíritu Santo, no es sino que lo deje mover en medio de
las aguas.
El
Señor nos pondrá a predicar en una forma dura e insultante y aunque no oigan
tendremos que predicar porque dice Ezequiel 3: 27: “Mas
cuando yo te hubiere hablado, abriré tu boca, y les dirás: Así ha dicho Jehová
el Señor: El que oye, oiga; y el que no quiera oír, no oiga; porque casa
rebelde son”.
Maranata, Cristo viene,
hoy es ultimátum para tu alma, hoy puedes salir de esta dimensión, Dios puede
llamarte ya definitivamente. ¿Estás preparado para el encuentro con Dios?
Dejemos de jugar al “cristianito” que eso no sirve.
O se es un cristiano o se
es un cerdo que se revuelca en cualquier parte como se revuelca todo el mundo a
través del pecado. No puede ser las dos cosas, esto es tiempo de definición,
porque el moverse de Dios arrancó y él quiere que lo dejemos mover. Simplemente
lo que tenemos que hacer es dejarlo mover.
No le eche la culpa a
Satanás, es usted el que no está dejando mover al Espíritu Santo.
Hay propósitos de ese
moverse del Espíritu Santo. Veamos un primer propósito.
1. Daniel
3: 17 18
“He
aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo;
y de tu mano, oh rey, nos librará. Y si no, sepas, oh rey, que no
serviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la estatua que has levantado”.
Los siervos de Dios habían
sido lanzados a los leones y vea esta declaración.
Declaró la palabra como Abraham “regresaremos”. Dejaron mover al Espíritu de
Dios.
Estaban completamente
radicalizados.
El Señor nos puede llamara
en cualquier momento y nosotros todavía
en ambivalencias.
2.
Cumplimiento
hay que dejar mover al Espíritu Santo para que se cumplan las cosas
Romanos 4: 20 -21
“Tampoco
dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe,
dando gloria a Dios, plenamente convencido de que era también poderoso
para hacer todo lo que había prometido”.
No dudó porque dejó mover
al Espíritu Santo. El espíritu Santo es todo suficiente.
Cuando le creemos a Dios
estamos diciendo: Aleluya, Gloria a Dios.
Debemos estar plenamente
convencidos de que Dios está con nosotros y si Dios está con nosotros ¿quién
contra nosotros?, que se atrevan pues y no se dice esto último por jactancia
sino por la fe que nos ha sido consignada.
Plenamente convencidos de
que Dios está al tanto de todas sus cosas. El espera el ejercicio de la fe, el
espera que usted ore por esas situaciones simplemente para que se fortalezca
usted mismo, pero él ya sabe qué necesidad tiene usted.
Lo que él necesita es que usted
esté plenamente convencido y deje mover al Espíritu Santo, en medio de las
aguas de esas promesas que él le ha hecho, para que usted viva por fe: “el
justo por la fe vivirá”, tiene certeza y seguridad de que lo que le prometió
eso aparecerá.
Maranata, Cristo viene, si
miramos con rasero lo que el Espíritu Santo nos está diciendo hoy, nos damos
cuenta de que somos incrédulos. Pues si estuviéramos esperando a Jesucristo no
tuviéramos la actitud que tenemos ahora.
Como están sus vestiduras
espirituales, cómo está la actitud suya en el día a día, si estás esperando a
nuestro Señor Jesucristo, si se está cumpliendo, Maranata: Cristo viene.
Todo lo que haga hágalo
como para él con alegría. Así no le guste. Si no puede ore y las debilidades se
convierten en fortaleza.
La clave está en pedir y
pedir creyendo. Cumplimiento de las promesas es lo que Dios quiere. Hay que
dejar mover al Espíritu Santo sobre las promesas hechas.
3.
Abundancia
Hay que dejar mover al
Espíritu Santo para la abundancia.
Sobre todo la espiritual
claro que la material también se puede dar porque para Dios no hay nada
imposible.
II Corinitos 9:
“Pero
esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que
siembra generosamente, generosamente también segará. Cada uno dé como
propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al
dador alegre. Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda
gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente,
abundéis para toda buena obra; como está escrito: Repartió, dio a los pobres; Su justicia
permanece para siempre. Y el que da semilla al que siembra, y pan al que
come, proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de
vuestra justicia, para que estéis enriquecidos en todo para toda
liberalidad, la cual produce por medio de nosotros acción de gracias a Dios”.
Ya no esperen a orar tarde,
dele las primicias a Dios. En la
madrugada hay que orar.
Como venga el día hay que
gozarse que Dios provee. No hay disculpa para no estar completamente en Cristo.
Si usted deja mover el
Espíritu Santo las bendiciones son por montones.
Subrayemos Toda gracia
y qué es toda gracia: la plenitud de Dios. Dios te pone en gracia en donde
quiera que vayas. Recordemos proverbios 16: 7 Cuando los caminos del hombre
son agradables a Jehová, aun a sus enemigos hace estar en paz con
él.
Que
pasa en nosotros que no estamos sobreabundando esa gracia. A veces lo que se
huele es la derrota.
Dios
diseño su palabra para que nos vaya bien, no tiene porque irnos mal.
¿Cuáles
pobres? A los pobres de espíritu.
El
versículo 10: Si usted deja que el Espíritu Santo se mueva entonces
multiplicará el poder la gracia y todo lo que el Espíritu Santo tiene para
nuestras vidas.
Versículo
11: el que se dispone el que deja que el Espíritu Santo se mueva sobre las
aguas siempre serás una persona enriquecida. La gente viene y halla un buen
consejo. El nivel es de una unción bien bonita.
4. El mover del Espíritu Santo es para
recibir lo inimaginable.
Cómo será el rapto, cómo
será: luz recogiendo luz.
Que bendición poder
escuchar la palabra y disponernos por encima de lo que sea y poder tomar una
decisión.
Filipenses: 3: 20- 21
“Mas
nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador,
al Señor Jesucristo; el cual transformará el cuerpo de la humillación
nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con
el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas”.
Acá somos solo peregrinos,
vamos de paso. Esperamos al Salvador. Que
en el momento del arrebatamiento Jesucristo si sea su Señor y que usted si está
obedeciendo su palabra.
Por qué el cuerpo a pesar
de ser templo del Espíritu Santo es de humillación, porque es naturaleza caída
por eso es de humillación. Para no caer tenemos que tener unos niveles de
oración grandes.
Efesios 3: 20 – 21
“Y
a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de
lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, a él
sea gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos
de los siglos. Amén”.
Tiene que permitir que se
mueva por las aguas tiene que dejar que se mueva. El poder del Espíritu Santo
que me fue dado cuando recibí a Cristo.
De la única manera que
podemos dar la gloria a Dios es dejando mover al Espíritu Santo en medio de su
palabra que ha sido consignado en nuestro corazón,
Maranata
Andemos irreprensibles,
Cristo te está mirando, el Espíritu Santo sabe que estás pensando, no murmure
en su corazón, en su mente de nadie, no se imagine mal de nadie, no mire mal de
nadie.
Dele las primicias en la
mañana.
Cristo Viene, Marnata
San Juan 17: 1
“Estas
cosas habló Jesús, y levantando los ojos al cielo, dijo: Padre, la hora ha
llegado; glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te glorifique a ti;”
Se llegó la hora de que Jesucristo sea
glorificado en su iglesia.