miércoles, 24 de junio de 2015

Todo o nada



La salvación es un regalo de Dios, Jesucristo nos regaló la salvación derramando su sangre preciosa en la cruz del Calvario.
 
Sin embargo nosotros tenemos que pagar un precio para pedir santidad y pedir a Dios que nos de aumente cada día la fe. 

Acá estamos en una sana doctrina, somos pocos, pero la doctrina es muy sana.

De que nos sirve decir que aceptamos la salvación si no adquirimos fe ni nos ponemos en obediencia y consagración.

Es un mal negocio venir aquí cada 8 días o dos  o tres veces a la semana para seguir aceptando las cosas del mundo y cayendo en pecado continuamente. Yo el primero que he sido llamado al orden de que me vale saber mucho de la Escritura si no me comprometo totalmente con Cristo el Señor.

Como estamos los seres humanos ante el mundo espiritual. Todos tienen la oportunidad de salvarse, Dios todo lo perdona menos el pecado contra el Espíritu Santo.  Veamos.

1.       Se Condenan

Juan 5: 29

 “y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación”.

Vemos que si hay un cielo y un infierno y no existe lo que en alguna secta llaman el purgatorio. No hay lugares intermedios. El purgatorio es un invento, puesto que la palabra de Dios solo habla de un cielo y un infierno y la palabra de Dios no se puede contradecir.

2.       Tibios

A Dios le gusta todo o nada. 

Apocalipsis 3: 15 - 16

“Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente!  Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca”. 

Dios quiere compromiso no le gusta a medias tintas. Le gustan más los fríos tal vez porque son más dados a entender, que los tibios, o en el peor de los caso porque para todos es claro que son enemigos de Dios. Además si nosotros somos tibios no aceptan en una parte y nos rechazan en las dos. 

3.       Doble ánimo

Santiago 1: 8

“El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos”. 

“La persona de doble ánimo es la que todavía sigue haciendo cosas del mundo es jalado de acá, pero también es jalado de allá. Es vacilante tiene dos sentimientos. Divide intereses y lealtades. Es inseguro, inconstante. Van a la iglesia y al bar. Se enojan con Dios y le echan la culpa de lo malo que les pasa”.

Estos son amigos del mundo 

Santiago 4: 4

“¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios”. 
Cuando nos hacemos amigos del mundo entramos en adulterio espiritual. 

Enemigos del mundo

 Todos los que son enemigos de Dios hacen lo que dice Gálatas 5: 19

“Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios”.

Lo que no quiero hago

Romanos 7: 15

“Porque lo que hago, no lo entiendo; pues no hago lo que quiero, sino lo que aborrezco, eso hago”.

Todavía la carne ejerce cierto control, pero ya nos arrepentimos de corazón. A cuántos nos ha pasado esto que hacemos lo que no queremos hacer.

Hay que buscar ser perfectos. Tenemos que llevar el paquete completo porque usted puede decir que acepta la salvación.

Yo quiero agradar a Dios y cada vez debe ser menos las cosas que hago que no le agradan a Dios.

Cuando nos metemos realmente con Dios obtenemos grandes beneficios. Hasta en el rostro se nos nota cuando estamos bien enfilados con Dios.

Comprometernos con Dios tiene que ser una decisión hoy porque Cristo está a las puertas.

Hay que buscar la perfección. Mientras más fe y más santidad tengamos, la vida  para nosotros es mejor. 


Debo tener fe 

Hebreos 11: 6

Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.            (Efesios 2:8 regalo la fe)

Ya nosotros sabemos que Dios existe, eso no lo dudamos, pero la segunda parte es la que toca con nosotros: Es galardonador de todos los que le buscan. Él nos va a premiar, nos va a dar un galardón porque lo buscamos de recto corazón.

La fe abarca ese galardón, por lo tanto no dudemos más sobre lo que Dios tiene para nosotros, no dudemos más de sus grandes promesas.

Acá en la oración arrebatamos las grandes bendiciones que Dios tiene para nosotros, pero vamos a la vida diaria y nos dejamos quitar esa bendición por la angustia que sentimos ante las cosas del día a día. Por el solo hecho de estar buscando a Dios recibimos el galardón, pero  muchas veces lo ganamos acá en la oración, pero lo dejamos en la puerta.

Santidad

Hebreos 12: 14

Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. 

Por eso es que Dios nos ha traído tanta palabra de exhortación, porque sin santidad no le veremos. Entonces es aceptar la salvación, procurar aumentar la fe y buscar la santidad. 

Preocupados por tantas banalidades en lugar de estar buscando la santidad que es la cualidad por cual veremos a Dios. 

Todos los que estamos aquí ya entendimos que es buscar a Dios, y si lo entendimos por qué es que no nos consagramos de una vez y para siempre. Dedicados al Señor del todo. Hemos escuchado testimonios por cantidades de que él resuelve nuestros problemas. 

Paga estar al lado del Señor porque él toma control de nuestras vidas. 

Todo esto lo entendimos, lo vivimos y sin embargo volvemos y dudamos. Cuando él nos ha demostrado muchas veces que si nos dedicamos a él, en las rodillas conquistamos lo que sea. 

Dios todo lo soluciona porque nada es imposible para él. Si aquí hemos conquistado tantas cosas por qué seguimos dudando. El enemigo nos quiere mostrar que la esperanza debe estar en un ser humano. El mundo nos quiere hacer creer que tenemos que poner nuestros ojos en los poderosos de este mundo y no podemos creer esa mentira porque nosotros tenemos al Rey de reyes y Señor de señores.

Usted necesita una cita con el presidente de la república y lo más seguro es que no se la den y necesita una cita con Dios que es el que hizo el universo entero y no es sino doblar las rodillas con corazón sincero y él lo recibe inmediatamente.

Apartarse 

II Timoteo 2: 19

Pero el fundamento de Dios está firme, teniendo este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo”.

El fundamento está firme y Dios le da un sello que es que Dios conoce a los que son suyos. Nosotros tenemos que hacer lo nuestro apartarnos de iniquidad para invocar el nombre de Cristo. Si nos hacemos amigos del mundo no nos estamos apartando de iniquidad y a Dios no le gusta que así invoquemos el nombre de Cristo.

Porque invocamos a Jesucristo tenemos que apartarnos de las cosas del mundo. 

Nosotros somos diferentes, somos distintos.

Nosotros hemos sido creados para la Gloria de nuestro Señor Jesucristo, eso es lo que debemos hacer glorificarlo por siempre. 

Nosotros hemos escuchado tanta palabra y tenemos que enfilarnos ya definitivamente con Dios. 

Estamos en mora de salir en las calles a predicar. Prepárense porque vamos a salir a las calles a predicar. Cristo vino a salvar almas entonces ¿en qué cree usted que él nos va a utilizar? Si nosotros somos su cuerpo, si nosotros somos sus siervos.

Perfectos:

 Mateo 5: 48

Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto”.

Este es el mandato que el Señor nos dio. Si la escritura dice esto es porque si se puede porque Dios no dice cosas en su palabra por decirlas.

Si los ojos de Jesucristo son como fuego, dice el Apocalipsis, qué van a ver esos ojos, pues van a ver fuego, los que estén ardiendo, eso es lo que va a ver Cristo.

 Nosotros somos felices oyendo y aprendiendo la palabra de Dios, alabándolo y glorificándolo, vamos camino a la perfección y a fe que lo lograremos.

El galardón 

Mateo 5: 12

“Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros”.

Hoy nos está diciendo el Señor hoy apunte la fecha. ¿Lo vamos a perder por congraciarnos con el mundo? ¿Le vamos a dar gusto a los impíos en lugar de darle gusto a Cristo? ¿Vamos a perder el galardón por darle gusto a nuestra carne?

 Hebreos 11: 24-  26 

Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, escogiendo antes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleites temporales del pecado,  teniendo por mayores riquezas el vituperio de Cristo que los tesoros de los egipcios; porque tenía puesta la mirada en el galardón”.

Moisés tenía la mirada puesta en el galardón. Así debemos ser nosotros y renunciar a los deleites temporales del pecado. Si usted no alimenta los deseos de la carne, esos deseos se mueren de hambre.

Hoy prometemos que salimos de toda atadura, que renunciamos a ellas. 

Apocalipsis 22:12

“He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra”.

“Vengo pronto” y no viene  solo viene con un galardón para cada uno. ¿Nos vamos a perder ese galardón por no hacer la obra?

No podemos perder el galardón por no hacer las cosas de él. Él viene pronto y nos lo ha dicho de muchas maneras.

El viene pronto y su galardón con él. 

Pidámosle a Jesucristo que nos utilice porque él es nuestro Señor y nosotros sus siervos. Pidámosle almas a Dios para Cristo el Señor.

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